Una de las jóvenes está embarazada y tiene un bebé de un año y medio. Se tuvo que ir a vivir a una pieza junto a sus padres y 3 hermanos. En dos camas duermen 7 personas.
Por un incendio, dos familias perdieron todo lo que tenían este domingo en Pocito. Una de las jóvenes está embarazada y es madre de un bebé de un año y medio. A ese drama le suman que ahora los corrieron de las dos casas que habitaban en la finca. La madre de la chica embarazada dijo que no saben qué van a hacer, porque ahora viven todos amontonados en una pieza.
Evelin Loana Zarate (18 años) vivía desde hace 4 meses junto a su novio, Juan Reta (17), y su bebé en una de las casas de la finca ubicada en el callejón
Zaballa entre calles 12 y 13. Le prestaban esa vivienda, porque no tenían en donde quedarse.
La otra casa estaba habitada por un matrimonio y su hija de 7 años. La hermana de la mujer hacía poco tiempo que se había ido junto a sus dos hijos de esa casa.
Cuando el viento Zonda comenzó a soplar a más de 50 kilómetros por hora durante la tarde del domingo, el fuego que quemaba los pastizales cercanos a la finca alcanzó las viviendas. Sus habitantes pudieron salir y salvar sus vidas. Pero las llamas les quemaron la ropa y gran parte de los muebles.
“Yo no tengo cómo ayudarlos”, le dijo Ramona Elizabeth Lobos (47), madre de Evelin. “Se les arruinó lo poco que tenían, se les quemó la ropita del bebé y la de ellos, y también la mayoría de los muebles. Las pocas cosas que les quedaron están en el patio, porque no caben en mi casa”, agregó angustiada la mujer.
Lobos contó que “el dueño de la finca los corrió. Se enojó, pero no era culpa de ellos. Si los chicos no hubieran estado ahí se podría haber quemado más la casa todavía”.
Ahora, en la piecita también de entre calle 12 y 13 que habitan los Zarate Lobos duermen todos amontonados. “En la cama matrimonial duermo junto a mi marido y dos hijos de 12 y 13 años, y en la cama chica (de una plaza) duerme Loana con su bebé y mi otro hijo de 18”, lamentó.
La mujer dijo que su yerno trabaja casi todo el día “haciendo changas en el campo” y que ahora se tuvo que quedar en la casa de su tía, frente a la pieza de los Zárate. “El bebé está enfermo, tiene catarro y tenemos miedo de que el humo del incendio lo haya perjudicado”, contó Ramona Lobos.
Para colaborar con la joven pareja y su bebé, los interesados se pueden comunicar al 2644831870.
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